Abejas
La colmena de abejas del barranco del Nano vuelve a sufrir otro ataque
Las colmenas salvajes son imprescindibles para la vida del planeta por lo que es imperativa su defensa y conservación.
Es la tercera vez que esta colonia sufre daños para su exterminio, esta vez con palos y papeles impregnados en combustible.
Nuestro compañero Kiko, nos anuncia que la colmena de abejas del Nano ha vuelto a sufrir otro ataque; a pesar de la importancia de esta especie y de que el barranco del Nano es una Zona de Especial Protección incluida en la Red Natura 2000 de espacios protegidos de Europa, esta es la tercera vez que esta colmena sufre un ataque, y esta vez, además de grandes palos, han introducido papeles impregnados en combustible.
Si tuviéramos que nombrar como sumamente necesario alguno de los eslabones que componen las relaciones simbióticas que se dan entre los distintos elementos que forman y sostienen un ecosistema… ,sin duda alguna, uno de los fundamentales sería el que componen las abejas y sus colmenas. Su labor, tan compleja como primordial dentro de la Naturaleza, es un referente fundamental en la salud y desarrollo de cualquier ecosistema vegetal ya sea natural o urbano.
Dentro de esas labores, aunque no es la única, destacamos la conocida polinización, que es insustituible dentro del equilibrio natural del entorno vegetal. Y así lleva sucediendo por algo más de 50 millones de años.
Motivo, entre otros, por el que no debemos cejar en divulgar su conocimiento e importancia para el sostenimiento de la vida. Vital para tantas y tantas especies, entre ellas la nuestra propia. Por todas estas razones, se ha de proceder a un mejor conocimiento de los factores que les perjudican y fomentar su protección.
Los insecticidas, además de parásitos y otras enfermedades, llevan tiempo diezmando tan preciada especie. A estos males debemos añadir, con mucha tristeza y estupefacción, la serie de actos vandálicos por parte de algunas personas, a los que no con poca frecuencia son sometidas las abejas y sus colmenas. Llegando incluso a la destrucción de la colmena. Terrible e irreparable circunstancia que ya ha acontecido.
Las colmenas salvajes son escasísimas, contar en Melilla con una serie de colmenas salvajes, que se han formado, desarrollado y arraigado por si mismas en su ya mermado entorno natural… es un maravilloso lujo del que ni la naturaleza, ni Melilla puedan prescindir.
Por ello, se hace extremadamente urgente y necesario divulgar el ataque continúo que ha tenido lugar sobre varias colmenas salvajes en nuestra ciudad para concienciar sobre su importancia, enseñar a amarlas y evitar su destrucción en un futuro.

