residuos orgánicos
La Consejería dará acceso a Guelaya a la información ambiental que solicitó sobre residuos, especialmente referente a ECOEMBES
- Las propuestas de Guelaya en materia de residuos serán analizadas por la Consejería, aunque los ecologistas demandan mayor urgencia en la aplicación de las medidas.
- Se mantienen diferencias de interpretación sobre el vertido de las escorias que según los ecologistas deben ser enviadas a vertederos de la península.
Han transcurrido más de tres meses desde que Guelaya presentó al consejero de medio ambiente y sostenibilidad sus propuestas en materia de residuos tras los primeros 100 días de mandato. Por ese motivo, representantes de la asociación han vuelto a tener una entrevista con el consejero con el objeto de hacer balance de las peticiones anteriores y plantear nuevas.
Con respecto a las peticiones de información ambiental que la asociación solicitó a la Consejería, hemos recibido la confirmación de que los ecologistas tendrán acceso a dicha información. Especialmente importante es conocer los datos que presentó ECOEMBES para la solicitud de autorización de un Sistema Integrado de Gestión de Residuos.
Con respecto a las medidas encaminadas a la reducción y reutilización de residuos, la Consejería trasladó a la asociación su disponibilidad a ponerlas en marcha en los próximos meses, si bien para los ecologistas deberían estar ya en marcha.
También creemos que el retraso en conseguir el objetivo del 50% de los materiales reciclables, incluyendo la materia orgánica, debe compensarse con medidas de reducción, prevención y reutilización de residuos con carácter de urgencia.
Además de estas peticiones, Guelaya ha trasladado otras nuevas que se vienen a sumar a las anteriores.
Como consecuencia del 8º informe sobre vertidos de escombros que la asociación publicó el mes de enero, se han trasladado las propuestas de solución que se requirieron al Gobierno anterior en mayo de 2018. El problema de los escombros siempre mejora meses antes de la “La Africana” y si no lo hace se limpia “manu militari”. Lo que nos preocupa es que meses después de la prueba deportiva todo vuelve a la misma situación, al olvido y a volver a empezar a limpiar sin ninguna medida preventiva, destinando ingentes cantidades de dinero público a campañas de limpieza, un capital que podría destinarse a otros fines sociales que demandan la intervención del gobierno local.
En materia de vertederos, Guelaya mantiene la petición de que las escorias de la incineradora deben ir a la península, ya que no son residuos inertes y por ello no pueden depositarse en el vertedero de residuos de demolición y construcción. Ese hecho motivó que la asociación presentara denuncia en la Fiscalía de zona de Melilla, quien abrió una investigación que está pendiente de resolverse con los resultados de los análisis que se han efectuado.
Finalmente, Guelaya ha manifestado su preocupación por las próximas novedades legislativas en materia de residuos que van a obligar a la recogida selectiva de materia orgánica o a la economía circular, y hemos vuelto a poner en la palestra el problema omnipresente de los plásticos.
Se van a producir cambios rápidos y urgentes para los que las CCAA están realizando experiencias piloto para adoptar medidas en una situación de emergencia climática, y Melilla tiene que hacer frente a enormes dificultades si quiere responder a las nuevas demandas legales.
Guelaya presentó sus propuestas sobre residuos al consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad. Estamos ante el fin del ciclo de la incineradora.
• Guelaya le pidió al consejero de CPM que rompa con la política del gobierno anterior en materia de residuos.
• La política que el PP ha mantenido durante 19 años a favor de la incineración no puede seguir manteniéndose ni un año más.
• No es de recibo que Guelaya tenga que presentar un recurso de alzada contra una resolución firmada por el anterior consejero en febrero antes de las elecciones y ahora tenga que ir contra un nuevo consejero porque se olvidaron de publicar en el BOME la resolución.
• La prevención y reducción de residuos y la reutilización de envases son las medidas imprescindibles para conseguir los objetivos de ahorro en la producción de emisiones de carbono en la incineradora.
El lunes 14 de octubre se celebró la primera entrevista entre el nuevo consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad, transcurridos ya los primeros 100 días de mandato y un representante de Guelaya Ecologistas en Acción. Durante la entrevista, que se centró en la política pública de residuos, se entregó una carta al consejero en el que se analizaban los problemas que hereda del Gobierno anterior y que ahora son de su responsabilidad, y las propuestas de actuación que Guelaya pedirá a la consejería durante los próximos cuatro años.
Los ecologistas entienden que el cambio de signo político de la consejería es una oportunidad para cortar con la nefasta política de residuos que los gobiernos anteriores han mantenido, priorizando la salud económica de la empresa REMESA, que gestiona la incineradora, y manteniendo la incineradora al límite de su capacidad de incineración, lo que ha retrasado durante 12 años la puesta en marcha de los planes de reciclaje. De hecho, estos planes todavía no terminan de completarse cuatro años después de la obligación de instalar en las calles el contenedor amarillo.
Los datos sobre los incumplimientos en el reciclaje de envases plásticos son elocuentes y comenzaron en 2008, fecha en la que se estableció el objetivo mínimo en España de reciclar el 22.5% de los envases plásticos. Posteriormente, la nueva ley de residuos elevó al 50% el porcentaje de reciclaje y obligó a poner contenedores amarillos en las calles a partir de 2015.
En septiembre de 2015 Guelaya reclamó este incumplimiento al anterior consejero, y trascurrido su mandato, todavía no se ha terminado de instalar las infraestructuras necesarias para poder cumplir con el objetivo de llevarse a la península el 50% de los plásticos.
La política que hereda el nuevo consejero de medio ambiente ha provocado que se queme innecesariamente desde 2008 la cantidad de 18.078.43 toneladas de envases plásticos para «alimentar» a la incineradora. Nos ha costado más de un millón de euros, 1.141.205,87.
Guelaya espera que la política de residuos de Melilla se aparte de la incineradora lo más rápidamente posible, y establezca como prioridades:
1.- Priorizar la puesta en marcha del Plan de Prevención de Residuos del Plan Integral.
2.- Priorizar la puesta en marcha de acuerdos para implantar en Melilla un sistema de retorno de envases con grandes superficies y pequeños comercios y prohibir las bolsas de plástico y los plásticos de usar y tirar.
3.- Cumplir con los objetivos legales de reciclaje y envío a la península de materiales.
4.- Incorporar la recogida selectiva de bioresiduos (materia orgánica) y determinar si se van a enviar a la península o se va a instalar una planta de digestión anaeróbica con producción de energía.
5.- Sustituir la electricidad que va a dejar de producir la incineradora por la producción de electricidad en Melilla de energías renovables.
6.- Planificar el cierre de la incineradora de Melilla
7.- Y sobre el recurso de alzada ante el convenio con Ecoembes:
Que la consejería aporte a Guelaya los informes de seguimiento del tratamiento de los residuos que establece la ley 22/2011 que hemos demandado en el recurso de alzada.
Sacar a información pública el convenio que se acuerde con ECOEMBES y abrir un plazo de evaluación ambiental del convenio y presentación de alegaciones para que se pueda hacer efectiva el derecho a la información ambiental y la participación social en materia de residuos.