Los terrenos no urbanizados de Melilla se convierten en vertederos incontrolados
La semana pasada una llamada al teléfono de Guelaya informó de un vertido de lodos junto a la pista de carros, en el inicio del futuro (eso esperamos que sea) proyecto de Sendero Verde, en una parcela de terreno que es propiedad de la Ciudad Autónoma .
El vertido se produjo la semana pasada, y así lo comprobamos. Creemos que se trata de los lodos del estanque del parque forestal. Pero, ¿por qué se hacen vertidos de lodos en un terreno de la Ciudad Autónoma que no es un vertedero legalmente constituido?
El solar, que tuvo en su momento un cerramiento, es más bien un vertedero no controlado de propiedad pública que contiene escombros, residuos sólidos urbanos, y lodos, por donde pasa gente por senderos que no son precisamente verdes.
Nada impide el paso de personas por el lugar. Los lodos, que proceden del estanque, son fruto de la decantación de las aguas que la depuradora de aguas residuales suministra.
Como denunciamos públicamente en septiembre en los medios de comunicación, el terreno está situado frente a una placa que informa que para una Europa mejor, se ha construido con dinero europeo un Centro de Interpretación de la Naturaleza (que ha desaparecido para dejar su lugar al Museo del Fósil).
Da vergüenza como melillenses ver ese cartel limitando con lo que es en toda regla un vertedero incontrolado de propiedad pública, motivo por lo que España ya ha sido multada por la Unión Europea. Que nosotros sepamos, nadie ha analizado los lodos para comprobar que no contienen metales pesados y son aptos para ser reutilizados (en jardinería, por ejemplo).
¿Por qué se vierten los fangos del estanque del parque forestal en un terreno público en la cercanía de pozos para el abastecimiento de agua potable? ¿No sería mejor trasladarlos a la propia EDAR?
¿Por qué los fangos de la depuradora de aguas residuales tienen que ir a la incineradora y los del estanque del parque forestal, que tienen el mismo origen, se pueden tirar en cualquier sitio?